top of page

Upcoming Events  Próximos eventos

guadalupe 2023.jpg
Jueves Eucharistico2023.jpeg
immaculate.jpg

This Week's Reflection

A Heavy Burden, Hard to Carry

 

“Mommy, you haven’t been making any sacrifices.”

 

My daughter was peering through the little opening in the plastic cover of the “sacrifice jar” we made for Lent this year. The repurposed oatmeal container, jazzed up with glitter glue and pictures of St. Therese of Lisieux, was more than half-filled with little slips of paper bearing descriptions of the various sacrifices family members had made for one another.

 

But she was right: every piece of paper bore the childlike scrawl of herself and her brother. I had not added anything to the sacrifice jar.

 

“If I wrote down every sacrifice I made for you in just a single day, the jar would explode,” I retorted, and even though my daughter giggled, I instantly regretted the comment, sighing as I realized I did it again. I let a snide, self-pitying thought form on my lips and make its way into the world because for a brief moment I thought someone didn’t appreciate my (imagine me sniffing injuredly here) hard work.

 

We sneer at the scribes and the Pharisees as Jesus describes them in the Gospel, lengthening their phylacteries and coveting the places of honor. But then I remember: nobody starts out meaning to be  detestable.

 

We want to do good things. We try to be holy. But it’s hard, that burden weighs heavy on our back.

 

So, we murmur about it here and there. We stop to catch our breath. We glimpse other people looking at our burden with approval and admiration, and we breathe a little harder, groan a little deeper. And somewhere along the way the burden becomes an idol and our labor a performance. We dare not ask for help bearing it, for we prize too greatly the sweat of our own brow.

 

“The greatest among you must be your servant.” — Matthew 23:11

Una Carga Pesada, Difícil de Llevar

 

"Mami, no has estado haciendo ningún sacrificio."

 

Mi hija estaba mirando a través de la pequeña abertura en la tapa de plástico de la “jarra del sacrificio” que hicimos para la Cuaresma de este año. El recipiente de avena reutilizado, adornado con pegamento brillante e imágenes de Santa Teresa de Lisieux, estaba más de la mitad lleno con pequeños trozos de papel con descripciones de los diversos sacrificios que los miembros de la familia habían hecho unos por otros.

 

Pero tenía razón: cada hoja de papel tenía el garabato infantil de ella y su hermano. Yo no había añadido nada a la jarra del sacrificio.

 

“Si escribiera cada sacrificio que hice por ti en un solo día, el frasco explotaría,” repliqué, y aunque mi hija se rió, me arrepentí al instante del comentario, suspirando al darme cuenta de que lo había vuelto a hacer. Dejé que un pensamiento sarcástico y de autocompasión se formara en mis labios y se abriera paso en el mundo porque por un breve momento pensé que alguien no apreciaba mi arduo trabajo (imagínenme lloriqueando lastimada aquí).

 

Nos burlamos de los escribas y fariseos como Jesús los describe en el Evangelio, alargando sus filacterias y codiciando los lugares de honor. Pero luego recuerdo: nadie comienza con la intención de ser un detestable.

 

Queremos hacer cosas buenas. Tratamos de ser santos. Pero es duro, esa carga pesa mucho sobre nuestra espalda.

 

Entonces, murmuramos sobre eso aquí y allá. Paramos para recuperar el aliento. Vislumbramos a otras personas mirando nuestra carga con aprobación y admiración, y respiramos un poco más fuerte, gemimos un poco más profundo. Y en algún punto del camino la carga se convierte en un ídolo y nuestro trabajo en una actuación. No nos atrevemos a pedir ayuda para soportarlo, porque apreciamos demasiado el sudor de nuestra propia frente.     

 

“Que el mayor de entre ustedes sea su servidor.” — Mateo 23:11

OFFICE HOURS ⎮ HORARIO DE OFICINA

Monday (lunes) to Friday (Viernes)

9:00 am – 7:00 pm 

 

&

Saturday & Sunday (Sabado y Domingo)

9:00 am - 1:30 pm

*Weekday Office Closes | Entre Semana Oficina Cierra de 2pm to 3:00 pm

bottom of page